Durante muchos años estacionar, en la ciudad de Buenos Aires, fue una tortura para los pequeños automóviles. Tanto por los daños que sufrían como por aparecer a varios metros de distancia de donde se lo había dejado estacionado. Hoy veremos como el Paragolche resuelve de una vez y para siempre ese odioso problema de estacionamiento.
La empresa Mach and Con produce, en el país, bajo patentes y principios de Blas Pascal un invento que dieron en llamar: Paragolche. El invento en cuestión no es otra cosa que cuatro arietes de accionamiento hidráulico que se colocan en reemplazo de los paragolpes de fábrica.
Dichos arietes permiten ejercer una presión de diez toneladas y se accionan simplemente por un pedal que se ubica entre el freno y embrague de nuestro amado automóvil. Automóvil que podemos dejar estacionado en la calle y lo encontramos aprisionado entre dos moles que impiden…
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