Un equipo de investigadores afirma que la diversidad del rostro humano pudo haber evolucionado para que resulte más sencillo reconocer a las personas.
Ojos saltones, narices aguileñas, mandíbulas prominentes, hoyuelos… Todos esos rasgos nos hacen diferentes y permiten que no haya dos caras iguales. Ahora, un nuevo estudio afirma que la forma y configuración del rostro humano cambia más que cualquier otra parte del cuerpo. De hecho, los genes relacionados con la estructura de la cara varían más que los de otras zonas del cuerpo…CONTINUAR LEYENDO
La diversidad de pensamiento es como los colores